¿Qué es el entrenamiento invisible para un deportista?

Si eres como yo, probablemente has dedicado horas y horas de tu vida al gimnasio, en la pista, en la piscina o dónde sea que persigas tus metas deportivas. Puede que hayas marcado cada repetición, cada serie, cada kilómetro y cada caloría en tu diario de entrenamiento; pero ¿qué pasa con las horas que no estás oficialmente “entrenando”? ¿Qué pasa con el tiempo que pasas fuera del área de entrenamiento ya sea pista o carretera? Aquí es donde entra en juego el llamado entrenamiento invisible.

Ahora pensaras, “¿entrenamiento invisible? Suena demasiado extraño”. Y sí, a primera vista puede parecerlo, pero te aseguro que es una parte integral del rendimiento deportivo y del cuidado personal. No se trata de hacer sentadillas mientras duermes, ni de levantar pesas “fantasmales”, el entrenamiento invisible es todo lo que haces cuando no estás activamente entrenando, pero que contribuye a tu rendimiento deportivo y a tu bienestar general. Vamos a profundizar en ello y descubrir por qué es tan importante. 

¿Qué es el entrenamiento invisible?

Tras esta breve presentación, ¿qué es exactamente el entrenamiento invisible que hemos mencionado? En pocas palabras, el entrenamiento invisible se refiere a todos los aspectos que complementan tu entrenamiento físico activo, pero que suelen pasar desapercibidos, aunque juegan un papel crucial en el rendimiento y tu salud.

Ejemplos de entrenamiento invisible serían la alimentación, la hidratación, el sueño, el manejo del estrés, la recuperación activa y la movilidad, entre otros. Todo ello conforma ese ‘entrenamiento invisible’ que puedes estar subestimado. Pero créeme, si realmente te tomas en serio tus metas deportivas, querrás poner tanta atención y esfuerzo en estas áreas como lo haces en tus sesiones de entrenamiento con tu entrenador personal online. 

Pilares del entrenamiento invisible: Nutrición, descanso, salud mental y ejercicio complementario

Vamos a hablar de los que sin lugar a dudas son los cuatro pilares fundamentales del entrenamiento invisible: la nutrición, el descanso, la salud mental y el ejercicio complementario. Aunque a veces no prestamos la atención que merecen a estas características, estos aspectos pueden marcar una gran diferencia en tu rendimiento y en cómo te sientes durante tus entrenamientos. Te adelanto que dedicarles un poco más de tiempo y atención puede ser un cambio de juego en toda regla. Te enseño en qué consiste cada uno de los pilares del entrenamiento invisible.

Nutrición e hidratación: La comida es nuestro combustible. Una nutrición adecuada puede ayudarte a rendir mejor en tus entrenamientos y a recuperarte más rápido después. La hidratación, por su parte, es esencial para mantener tus niveles de energía y prevenir calambres y fatiga. 

Descanso y recuperación: Tu cuerpo necesita tiempo para recuperarse después de un entrenamiento. Dormir lo suficiente y de calidad es esencial para la reparación de los tejidos y para mantener tus niveles de energía. El descanso activo, como los días de recuperación suave, también son importantes. 

Gestión del estrés y salud mental: El estrés crónico puede tener un impacto negativo en tu rendimiento y recuperación. Practicar técnicas de relajación y cuidar de tu salud mental pueden ayudarte a manejar mejor el estrés y a mantener tu motivación. 

Ejercicio complementario y movilidad: Existen todo tipo de actividades que pueden ayudarnos durante el entrenamiento invisible, siendo éstos de baja intensidad. Por ejemplo estiramientos, yoga o ejercicios de movilidad ayudan a mejorar la flexibilidad, prevenir lesiones, siendo también vitales para una recuperación más rápida. 

El entrenamiento invisible puede no tener la misma emoción que correr un sprint hasta la línea de meta o superar tu marca personal, pero te aseguro que los resultados de prestar atención a estos aspectos serán igualmente emocionantes. Mejor rendimiento, recuperación más rápida, menor riesgo de lesiones y, lo más importante, sentirte bien contigo mismo.